Después de 18 días de protestas continuas, el pueblo egipcio logró forzar la dimisión del que fuera su presidente durante 30 años, Hosni Mubarak. La suya ha sido una lucha valiente contra décadas de represión, corrupción y extrema pobreza.
El equipo de investigación de Amnistía Internacional en El Cairo vivió aquel momento con gran emoción:
“Resulta casi imposible describir con palabras el ambiente que se vivía en la plaza de Tahrir la noche en que Hosni Mubarak dimitió....
Pasarán años y podemos imaginar a nuestros hijos o nietas poniendo los ojos en blanco mientras repetimos, tal vez con una mirada fugaz de nostalgia o lágrimas en los ojos: 'Yo estuve allí, en medio de aquella marea de personas de todas las edades, clases sociales, ideologías políticas, musulmanes y coptos, hombres y mujeres, pobres y ricos, con velo y sin él, y me sentía parte de un Egipto totalmente nuevo que estaba renaciendo'... (sigue leyendo)'”
Mané, tú también eres parte de ese nuevo Egipto que ahora mira al futuro con esperanza. Contigo fuimos casi 140.000 las personas que firmamos para apoyar a los manifestantes que, en su lucha por los derechos humanos, arriesgaron su propia vida.
Sin embargo, queda mucho por hacer. Y lo primero es garantizar que los derechos humanos y las libertades están en el corazón de la transición política en Egipto. Por favor, firma aquí nuestra petición a las nuevas autoridades.
Además, quiero pedirte que te unas a Amnistía Internacional. Porque te necesitamos. Sólo tu contribución, por pequeña que sea, nos permitirá seguir trabajando por un mundo donde todas las personas disfruten de sus derechos humanos.
Te esperamos.
Esteban Beltrán
Director de Amnistía Internacional – Sección Española
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